Basta con que alguien se ponga un gorro de Papá Noel para que todo el mundo se contagie del espíritu de dar. Algunos quieren darle a la próxima mujer que vean una follada de coño o posiblemente un cunnilingus, y a las mujeres nada les gustaría más que un tío les metiera la polla en la boca y les follara la cara para que se tragaran un creampie.