Cuando Me Muevo Te Mueves. Hay un lugar vacío en el corazón de toda chica que nunca podrá llenarse una vez que haya perdido a su amante. Y aunque las tarjetas, las flores y las amables palabras de condolencia pueden ser reconfortantes, su insaciable deseo de sexo y pecado es una fuerza abrumadora que la conducirá hacia un oscuro y pervertido frenesí sexual que ningún hombre... o mujer, puede satisfacer. Sus labios carnosos y húmedos, su piel sedosa y bronceada, cada centímetro de su hermoso y joven cuerpo se estremece de deseo y de una ardiente pasión por nuevos amores y encuentros salvajemente eróticos aún por descubrir.