Lo primero que se pierde en una relación problemática es la honestidad. Raymond (Kyle Stone) ama a su esposa Donna (Madelyn Knight), pero algo le está llevando al límite y a los brazos de desconocidos anónimos que le proporcionan placer a cambio de un precio. El precio es realmente alto mientras Donna lucha por mantener la cordura y Raymond se adentra cada vez más en su obsesión. Un final climático hace colisionar la mayor fantasía de Raymond con su peor pesadilla.