Menage A Roz trabajaba como guardia de seguridad en un centro comercial, en el departamento de ropa de mujer. Todas las semanas pillaba a un par de botarates por robar vestidos en las tiendas. Luego la despidieron por dejar que un delincuente le comiera el coño como forma de hacer un trato para ella. ¡Eso sí que es una confesión caliente!