Layla Jade es una huesuda británica que vino del Reino Unido a Estados Unidos en busca de una mayor variedad de pollas por las que dejarse follar. Su sueño de carne americana de grado "A" se desbocó hace unos años, cuando se metió en este negocio y empezó a dejar que los tíos le deshuesaran el trasero como primera parte de un cajero automático.