Nikki Nievez y Stacy Thorn se unieron a este afortunado muñeco de carne y pronto se convirtieron en un dos contra uno, mientras estas reinas del sexo enmascaradas se turnaban para cabalgarle la polla y chuparle la vara. Ocultaron sus preciosos rostros, pero no les costó nada llevarlo hasta un clímax de semen desordenado, que se intercambiaron.