Kayla Quinn aprendió que los hombres sienten mucha lujuria por sus grandes tetas y empezó a utilizarlas como herramienta para llegar a donde quería en la vida. Ganando más dinero como actriz porno que en su trabajo diario, ahora Kayla utiliza esas grandes tetas para conseguir los mejores papeles en películas porno interraciales, haciendo mamadas pegajosas y recibiendo corridas faciales con los negros calientes que ansía.