Barbara Summer es una zorra rubia blanca y pálida que pasó años satisfaciendo a los hombres de su ciudad natal. Cuando se mudó a la gran ciudad, docenas de tíos hacían cola ante su puerta para tener una última oportunidad de rellenarle el coño durante una o dos horas. Por arte de magia, su chochito sigue estando súper apretado, ¡y eso se nota en este pecaminoso episodio!