Faith Leon se da un largo repaso en el espejo de esta lujosa habitación roja antes de tumbarse sobre las mantas de pana y quitarse la lencería. Grita de placer terrenal cuando le entierran los dedos en lo más profundo del coño y le pasan la lengua por el clítoris. Sus tirabuzones morenos caen sobre el borde de la cama mientras él le penetra el coño, ¡y Faith acaba con una pegajosa corrida facial!