Si nunca has visto a Audrey Hollander en la posición del apisonador, en realidad nunca has visto la posición del apisonador. A esta chica se le deberían conceder los derechos de autor y la marca registrada de esa postura, porque nadie en el planeta la ha perfeccionado como ella. Cada agujero está perfectamente alineado cada vez que ella se extiende para ello.