Kelly Leigh es una sucia madre bibliotecaria. Es tan reservada en el trabajo que, cuando sabe que tiene la casa para ella sola, se convierte en una sucia puta. Follar con hombres negros es lo que más sucia la hace sentir, porque es lo más prohibido en su barrio de blancos. Hoy ha llamado a su chico para que la penetrara dos veces. Siempre dispuesto a complacer a su dulce mamá, le mete un consolador hasta el fondo del culo y le folla el coño hasta que saca y deposita su carga en su boca.