A Eliza le encanta el sexo. Desde que cumplió los dieciocho, es como si no tuviera suficiente. Así que cuando se ligó a este tío latino de pelo largo, sabía adónde llevarlo: ¡a la cama! Eliza se quita las bragas antes que el sujetador mientras chupa la polla de su hombre para ponerla bien dura y que él pueda echarle las piernas por encima de la cabeza y follársela hasta mañana.