Casey Parker nunca había hecho sexo anal, no delante de una cámara, y dijo que sería más fácil si la ataban. Como no quería ponerle las cosas demasiado difíciles, el director accedió. ¡Qué delicioso aspecto tiene este caramelito de culo con su atadura y su mordaza! Ahora puede retorcerse todo lo que quiera, pero no puede escaparse mientras tenga juguetes en el culo.