A Amy Lee le han pedido que haga sexo anal para un próximo rodaje porno, pero hace años que no lo hace. Su masajista se acerca para ayudarla a abrirle el culo trabajando profundamente en su recto con su polla dura. Conseguir que su ano se relaje y se abra ayudará a Amy a manejar con placer la escena de doble penetración con cuatro pollas programada.