Kristine Kay se ha follado a unos cuantos universitarios, pero nunca se ha corrido de verdad, ¡y eso cambia hoy! El amigo de su padre viene de visita y encuentra a Kristine sola en casa. No puede resistirse a sus jugosas tetas y pronto están follando por todo el sofá. La inclina y le penetra el apretado y húmedo coño con su enorme polla.