Kimberly Kendall sabe que no debería follarse al papá de su mejor amiga, ¡pero no puede evitarlo! Es adicta a su polla y a la forma en que la coge y se la folla como si fuera un juguete sexual construido para su placer. A Kimberly le gusta cuando él le empuja las piernas por encima de la cabeza para poder ver cómo su polla se folla su húmedo coño.