Están ahí... en el supermercado, en la oficina y en el banco. No puedes detectarlos porque parecen muy normales con su ropa de calle. Sólo puedes preguntarte: .... ¿Es esa chica tan mona de ahí una de ellas? Una rara raza de mujer que encaja en algún lugar entre la elegancia de la forma femenina y la ferocidad de un animal carnal no enjaulado. ¡Deja de preguntártelo y descúbrelo!