Esta mamada se calienta rápidamente al pasar de estar de pie a estar tumbada, y pronto hay un sesenta y nueve en toda regla. Mira cómo le coge la polla con las dos manos y se la mete en la boca, chupándosela hasta el fondo de la garganta. Sus grandes tetas cuelgan mientras hace su trabajo, y pronto tiene la boca bien abierta, ¡dispuesta a recibir una salada corrida!