Olivia ha estado en todos los países de Europa, así que ha venido a Estados Unidos con la esperanza de recibir una polla de los cincuenta. Se pasea con ropa diminuta y coquetea con los hombres a través de sus grandes gafas de sol redondas, y ellos siempre encuentran un sitio para follarse su coño chorreante, por muy arriesgado que sea. Nunca la han pillado, pero siempre recibe montones en la boca o en las tetas.