Tracy Ryan no tiene que volver a preocuparse por pagar el alquiler, porque ha decidido meter todas sus pertenencias en una furgoneta y empezar a viajar por el país. Siempre hay una ciudad nueva que ver y gente diferente que conocer, pero últimamente ha estado dejando que este paleto de mierda blanca entre en su humilde morada para practicar sexo caliente a pelo, por el que quizá tenga que aparcar en un parque de autocaravanas.